El caso mas antiguo de nuestra ciudad seguramente sorprenderá a la gran mayoría de bahienses dado que se remonta al año 1892. En el periódico "El Porteño" que se editaba en aquella época en nuestra ciudad, aparece la descripción de lo que se dio en llamar "un fenómeno meteorológico". En dicho periódico se narra la aparición de lo que se interpreto como un "meteoro". Este se entretuvo en recorrer los cielos bahienses durante unas tres horas, desafiando todas las leyes astronómicas y físicas.

En el mismo artículo aparece una interpretación muy propia de dicha época. A causa de encontrarse amarrado a corta distancia de nuestra ciudad un barco británico, el cual poseía corriente eléctrica, se pensó que dicha energía crearía tal fenómeno. Todos sabemos en la actualidad los alcances que posee la energía eléctrica y en consecuencia sus limitaciones.

Por lo que deducimos que dicha explicación carece de fundamento. En el mismo informe se narraba que el objeto o "meteoro" se desplazaba a gran velocidad y en contra del viento, efectuando maniobras increíbles, y en especial zig-zag, y bruscos cambios de rumbo. Todo ello es característico de los discos volantes. Asimismo su color rojizo y sus movimientos. Si pensamos que en 1892 no existían aun los aviones, llegamos a la conclusión de que esos fenómenos aéreos si aún no reproducibles en la actualidad, no tienen ninguna relación con la ciencia terrestre.